Enclavada en las alturas del encantador pueblo de Llauro, esta casa rural le invita a disfrutar de una estancia auténtica entre el mar y la montaña. Su entorno tranquilo lo convierte en el punto de partida ideal para explorar las riquezas naturales y culturales de los Pirineos Orientales. Ya sea para practicar senderismo, descansar junto a la piscina o explorar los alrededores, este alquiler de vacaciones es un remanso de paz, perfecto para relajarse con la familia o los amigos.
Desde este remanso de tranquilidad, salga a descubrir los tesoros de la región: senderismo y paseos por la naturaleza en el macizo del Canigou, playas y el Mediterráneo incluyendo Collioure y la Côte Vermeille, viñedos y gastronomía catalana. Pasee por las históricas calles de Céret, famoso por su Museo de Arte Moderno, o visite las murallas de Castelnou, uno de los "pueblos más bonitos de Francia". Los amantes de la naturaleza también pueden explorar el Parque Natural de Massane o el Macizo del Canigó.